Jueces 17
Había dicho a los chicos del grupo de los sábados que
leyeran esta historia y luego la primera impresión que se llevaron fue, realmente
no sabían porque estaba escrito en la Biblia algo sin sentido y un tanto
confuso.
La historia es de un hombre, llamado Micaía que llego a tener en su
casa dos ídolos de divinización, convirtió
su casa en un templo para esos dioses y a su hijo lo hizo sacerdote.
Luego aparece en la historia un levita de Belén que buscaba donde vivir
y Micaía lo contrata como sacerdote, pues le ofreció salario, hospedaje, ropa y
comida.
Micaía creía que al tener un Levita como sacerdote tendría la bendición
de Jehová, pero nosotros sabemos que Micaía había quebrantado muchas leyes
dadas por Dios.
También en el versículo 17.6 dice: En aquellos días no había rey en
Israel; cada uno hacía lo que bien le parecía.
Para poder aclarar sus ideas le pedí que hiciesen una
lectura de un capitulo anterior y uno posterior de manera rápida.
La historia anterior es la muerte de Sansón y la posterior de como los
de la tribu de Dan, roban esos ídolos, convencen al levita de irse con ellos y
Micaía queda como un cobarde perdedor.
También les mencione sobre que ocurrió con esos ídolos y de cómo fue
causa de muchos tropiezos durante el reinado de los primeros reyes hasta el
cautiverio por los asirios.
Pregunte a los chicos que enseñanza podemos sacar de esta
historia, a lo que me respondieron diversas ideas pero entre todos llegamos a
una conclusión.
Que a veces la ignorancia nos lleva a cometer errores
absurdos que van en contra de Dios.
Hemos de indicar que no todas las religiones llevan a la salvación,
puesto que muchos dioses han sido creados de maneras absurdas como los ídolos de
Micaías. Pero que otras grandes religiones con el paso del tiempo se han ido
sofisticando y en muchos casos como los musulmanes han sido introducidos a la
fuerza en sus pueblos conquistados. No quiero también sentenciar a los
cristianos, pero los católicos también han introducido el catolicismo en
nuestros países latinoamericanos con igual o peor aún…
Debemos ser sabios para poder distinguir la verdad y para
ello debemos leer siempre nuestra Biblia, y cada cosa que hagamos, como los
estudios, hacedlo con esfuerzo, como para el señor.
Entonces como cristianos nunca debemos conformarnos con lo
que sabemos sino buscar crecer en nuestro conocimiento bíblico. Eso nos permitirá
reconocer a los falsos profetas como Ezequiel Ataucusi, Jose Smith, Ellen G.
White, Russell o el Papa.
Terminemos con Oseas 4:6 “Mi pueblo perece por falta de
conocimiento”